• Banner
  • Banner
Viernes 3 de May de 2024
El tiempo - Tutiempo.net

¿Hasta dónde se conoce el árbol genealógico de Ernesto Gándara?

Carlos MONCADA OCHOA
Lunes 15 de Febrero de 2021
 

NAMAKASIA

Son ya dos o tres los intelectuales sonorenses que han intentado aclarar dudas sobre el resultado de la elección de gobernador haciendo un parangón entre los candidatos Durazo y Borrego Gándara: orígenes familiares, estudios, cargos privados, trayectorias políticas, etcétera. Pero en el caso de Gándara no llegan muy lejos cuando se trata de investigar su genealogía, a pesar de que se cuenta con una fuente confiable: el padre del candidato, don César A. Gándara.

En noviembre de 2003 (más o menos cuando Ernesto se encontraba al servicio del presidente panista Fox), don César dio a conocer un librito autobiográfico, “Guaymas y algo más”, en el que informa que desciende en línea directa de Manuel María Gándara Gortari, gobernador de Sonora en el Siglo XIX. Fue su bisabuelo. Escribe en la página 19 que aquel Gándara “fue un líder de luz y sombra ya que le ubican como colaborador de Maximiliano al designarlo Prefecto Imperial de Sonora en 1866” y que fue después “apoyo de Antonio López de Santa Anna quien lo condecoró con la orden de Guadalupe”.

Estaba en chino esperar que con esos antecedentes archiconservadores llegara a haber un tataranieto revolucionario en la descendencia de don Manuel María.

Pero, además, don César ve “luz y sombra” en su antepasado, pero el afamado historiador Francisco R. Almada, no encuentra en él luz y sombras, solamente sombras, ignominia y corrupción. No me arriesgo a mal interpretar el texto de Almada, copiaré sin quitarle ni ponerle algunos párrafos de su Diccionario de Historia, Geografía y Biografía Sonorenses”:

“Entonces (de 1831 en adelante) principió su serie de deslealtades y turbulencias que duraron más de 30 años y de las cuales fue principal agente y responsable, inclusive de la provocación de la guerra de castas”. Se declaraba centralista o federalista, según conviniera a sus intereses. Así, aceptó la gubernatura del Departamento (Sonora y Sinaloa) del presidente Bustamante, pero “un mes después verificó la segunda defección de su larga carrera política al secundar la rebelión federalista que encabezó el general José Urrea”.

A Urrea lo traicionó con la mayor facilidad. En octubre de 1841 reconoció el gobierno del general Santa Anna. “Su posición, considera Almada, constituye un reflejo de su falta de ideas políticas: cualquier sistema era bueno siempre que él volviera a ejercer su hegemonía local”.

Eduardo Bours Castelo tenía sólo unas semanas de gobernador y asistió a la presentación del libro de don César. No es improbable que haya ayudado a rescatar al Borrego de su oficina panista a petición del propio don César, que no dejaba de lamentar la desviación política de su hijo (no invento esas lamentaciones; en lo personal, me disparó una de ellas con amargura, compartiendo un café), pues retomó el camino como secretario particular de Bours, luego como comisionado de Turismo y finalmente como presidente municipal de Hermosillo. Se sintió en ese cargo con la fuerza suficiente para atrapar la candidatura a gobernador (2009) aún contra la voluntad política de Bours, que lo había ayudado a construir su carrera. Una deslealtad marca Manuel María Gándara.

Ahora que su padre descansa para siempre, ha regresado Ernesto “borrego” Gándara a los brazos del PAN. Ha caminado en círculos, como los cazadores que extravían el camino.

 

carlosomoncada@gmail.com


Política de Privacidad    Copyright © 2006-2024 InfoCajeme.com. Todos los Derechos Reservados.