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Mafias: Parasitosis o simbiosis social

Raúl Héctor Campa García
Martes 04 de Febrero de 2020
 

Parásito se define a un organismo que se alimenta de las sustancias que elabora un ser vivo de distinta especie, viviendo en su interior o en la superficie con lo que suele causarle un daño o enfermedad. Varios padecimientos, causan estos parásitos en los humanos. Teniasis, amebiasis, giardiasis. oxuriasis, etc.

Simbiosis. Asociación íntima de organismos de especies diferentes para beneficiarse mutuamente en su desarrollo vital. Por ejemplo, existen bacterias en el intestino humano, que ayudan a la síntesis de vitamina K2 y B12. Así como algunos bacilos no patógenos (“benéficos”), llamados probióticos, que ayudan a controlar ciertas enfermedades, como ejemplo, las diarreas provocadas por antibióticos.

Transpolando, estos términos médicos al ámbito social, en la interacción de los seres humanos y, según los diferentes daños o no, que pueden provocar al entramado social, pueden caer, guardando cierta proporcionalidad, en estas definiciones.

Uno se preguntará que afecta más a un País ¿Tener gente que vive como parásitos, que dañan socialmente y económicamente a la población, o a las mafias que monopolizan las actividades delictivas, pero que una parte de la sociedad, conviven con ellas en una verdadera simbiosis y “crean ciertas fuentes de empleos”, en lo que se conoce, como lavaderos de dinero ilícito? La respuesta lógica sería que todas afectan. Actividades que van contra la ética y moral de la misma sociedad; de quienes se involucran.

El término Mafia, su origen tiene visos de leyenda: Unos aseguran que proviene de la frase italiana de “Morte Alla Francia Italia Anela” (Muerte a la Francia, Italia añora), otros se refieren a las pandillas del crimen organizado, que se consideran “como una familia” (Mia Famiglia). “Cosa Nostra”, nuestra cosa, como otro nombre para sus ilícitos negocios.

Algunas otras connotaciones de mafia: Organización clandestina de criminales nacida en Sicilia que ejerce su poder mediante el chantaje, la violencia y el crimen (la mafia siciliana, en los Estados Unidos, que cobraban piso a negocios, y se dedican al contrabando de bebidas alcohólicas. Ejemplo en la época de Al Capone y otros). Organización clandestina de criminales que intenta conseguir el monopolio de sus actividades delictivas en una zona (narcotráfico). Grupo de personas que intenta conseguir el dominio absoluto sobre una cosa, empleando generalmente medios poco lícitos.

Las sociedades humanas, desde hace mucho tiempo, han vivido tolerando este tipo de convivencias. Perdiendo poco a poco la capacidad de asombro. Incluso desde los “actos menores” de corrupción, como serían las famosas mordidas a servidores públicos; en las burocracias oficiales que, algunos cobran por trámites gubernamentales, o las grandes mochadas que reciben los políticos por bajar recursos a otros niveles de gobiernos. Quizás estos políticos, entrarían en las definiciones de parásitos, que medran la salud de la economía de los gobiernos, haciéndose que hacen por la población. Las mochadas que los proveedores de Instituciones dan a funcionarios de distintos niveles, para poder vender sus productos y que al igual que muchos políticos se hacen de “mulas Pedro” en cada sexenio o trienio de gobiernos. Creando una cultura de deshonestidad, disfrazada de “honesta ciudadanía, donde a veces cae más un hablador que un cojo”. Tal vez la intención del gobierno de la 4T, este tipo de mafias oficiosas, las elimine (“algo es algo”. ¡Ojalá!). Porque las otras mafias criminales no creo que puedan con ellas, cuando no hay voluntad o el miedo los hace desistir. Tal parece que, como dicen algunos memes grillezcos: “que un tal general borolas, le heredo este frustrado combate al nuevo general sin bolas, que comanda al País”

Hay Parásitos sociales, que tal vez hagan “poco daño”, o solo daño intrafamiliar; como los Ni Nis, que ni estudian ni trabajan y no aportan nada a la sociedad, pero comen, se divierten y se cobijan, bajo la tutela familiar y algunos tras las frazadas gubernamentales. Algunos de estos Ni Nis, pueden mutar a alta patogenicidad y convertirse en extorsionadores, cobradores de piso y hacer de esto su modus vivendi. O pueden existir dentro de la oficialidad de gobierno, donde aportan poco y manotean mucho.

Puede haber dos tipos de “simbionismos”: La simbiosis benigna, que funciona con la estructura de una honesta sociedad, aportan mutuamente al crecimiento y desarrollo de los pueblos, de sus ciudadanos, Ejemplo: Las empresas o empresarios y los buenos trabajadores, con incentivos y buenos sueldos que otorgan aquellas y de la otra parte, el talento productivo de sus empleados. Las Instituciones de educación y de Salud, entre otras, que cumplen a cabalidad y con calidad su misión. Gobiernos con buena administración del poder y del desarrollo social y subsidiario, donde la ética y política deben ir de la mano (¿será mucho pedir?). Simbiosis benignas, que bien pueden iniciar en cada ser humano, en un seno familiar integrado, solidario, en donde la subsidiaridad se practica día a día y una sociedad con una alta estima de los valores y virtudes de cada ser humano.

Contra aquella, está la simbiosis maligna. La del contubernio de una parte de la sociedad (los menos), con las mafias del poder corrupto y corruptor, que se infiltra a todos los niveles, pero que, a la vez, decíamos al principio, pueden crear empresas como fuente de trabajo, utilizando fondos mal habidos o producto de actividades ilícitas, que en ocasiones son solapadas, por gobiernos en turno. Lavadero “empresarial”. Desgraciadamente esto provoca, en la mayoría de los casos, muerte.

Se menciona que la sociedad mexicana, a pesar de nuestra arraigada idiosincrasia nacional, es una gran imitadora de costumbres, de conductas y proyectos de otras sociedades. Bien, si es para un desarrollo armónico de nuestra sociedad.

No imitemos prácticas de mafias, ni de políticas que vayan en contra de la dignidad y de la libertad real de las personas. No de la libertad que se confunde con el libertinaje social, que conlleva a una mal entendida tolerancia de lo que debe ser rectamente intolerante o que degeneran la vida de los seres humanos. Antes de estar confrontados, por la ideática y necia “ideología de que existen más de 120 géneros”; mejor unámonos en la lucha de formar una mejor sociedad, para heredarles a nuestros niños, un mejor País. “Una Sociedad educada, es menos corrupta”.


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