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Convocados por el Frente Nacional por la Familia, más de 20 mil sonorenses tomaron las calles de varias importantes ciudades del estado para manifestarse en contra de la reforma promovida por Peña Nieto que busca el que en México se instaure el llamado "matrimonio igualitario", en otras palabras, el matrimonio entre personas del mismo sexo; Juana y Lola y Marcos y el Lupe, para acabar luego.
Independientemente de las razones que invocan uno y otro grupo y de la guerra de guerras que se dio en la redes sociales para defender, cada quien su causa, hay un ser que, como suele ocurrir entre las mismas parejas heterosexuales, que queda en medio de las disputas; el niño, ese pequeño que su condición de menor y falta de palabra lo condena a ser rehén de quienes perversamente, merced a sus disputas, lo mandan a llorar, en un rincón, lejos de las negociaciones de pareja.
Va con manzanitas para los que llegaron tarde al recuento de los daños: Curiosamente, ambas partes invocan el amor en defensa de sus intereses y posturas; los primeros, quienes avalan la reforma de Peña Nieto, “literal”, cual dirían los chavos de hoy, defendieron sus argumentos “ apunta de besos”, pero no como “ hembra y macho, como perra y perra”, que diría el nicaragüense, Rubén Darío, en sus versos, “Los Motivos del Lobo”, sino como Lalo, en su papel de Lola y Neto, en su papel de “ activo”.
Los segundos y que ayer tomaron las calles de más de cien ciudades del país para defender a la familia como célula de la sociedad. Y subrayan en sus argumentos; “Queremos que la Constitución tenga el texto íntegro de la Declaración de los Derechos Humanos que define a la familia como elemento natural y fundamental que debe ser protegido y tutelado por el Estado”.
Es decir, el derecho al matrimonio, sí, pero visto desde el punto de vista natural, como lo describe, precisamente la raíz del vocablo (del latín Matrem, madre y monium, calidad de, esto es, el derecho a ser madre, según la etimología de la palabra) y según la excepción más amplia de la palabra Matrimonio, en origen significa el estatus jurídico de una mujer casada y la maternidad legal, el derecho a ser madre legítima de los hijos de un varón y todos los derechos que de ello se derivan para la mujer, como la condición de “mater familias", de matrona y otras implicaciones inherentes.
Y contra esto, la verdad que no hay mucho qué hacer por más que haya algunas voces que insisten en que la violencia, maltrato y mala educación hacia los hijos se da en forma frecuente entre parejas o matrimonios heterosexuales, lo que en definitiva es muy cierto, sin embargo, no se requiere de una bola de cristal para adivinar que son muchos, pero muchísimos más los casos en donde miles de mujeres y hombres se han desarrollado y se siguen desarrollando en medio de igual número de matrimonios basados estos en el amor de pareja, esto, sin dejar de lado que, como se cita en una de las definiciones más precisas que he visto sobre el amor, este sentimiento, propio de todas las especies vivas, ha hecho más felicidad que todas las historias del paraíso mismo, pero, por igual, ha sido el causante de más muertes, de más tragedias, que todas las guerras juntas de la tierra.
¿La razón?: No nos hemos tomado el tiempo suficiente para entender, para explicar el amor, definido en tres aspectos; el amor hacia la naturaleza, las cosas, los bienes materiales; el amor filial entre padres e hijos, la familia, toda y el amor entre un hombre y una mujer, que cuando está basado en la armonía, la excelente comunicación, lejos de la aberración es capaz de alcanzar todos los sueños juntos del paraíso. Bueno, eso es lo que dice la definición a la que me refiero. Si ese es su caso, lector, no hay de qué preocuparse si ayer no le atinamos al Melate….
FIERRITOS EN LA LUMBRE…
Y, como lo malo también cuenta, mal empieza la semana para quienes llevan meses esperando que la Fiscalía Especial o ya de perdida la PGR, nos digan que al fin ya le echaron el guante a Guillermo Padrés Elías, el hombre al que únicamente le falta que le encontraron que se escrituró a su nombre el Palacio de Gobierno con todo y sus accesorios, pero, todo bien, no hay las pruebas suficientes como para poder fincarle un delito que lo mantenga en chirona por el resto de sus días.
Y empieza mal la semana por aquello de que, para variar, un juez federal acaba de congelar, con fecha de ayer, la orden de investigación, localización, presentación, detención, de aprehensión, bueno, de que hasta lo miren feo, caramba!, derivado, esto, de una averiguación previa iniciada por la Procuraduría General de la República.
Sobra decir que de nada servirá el que hoy se anuncia con todo bombo y platillo que ayer fue detenido, aquí en Sonora, Francisco Arnaldo Monge Araiza, mejor conocido como Pancho Platas, mismo que se sirvió, en el gobierno de Padrés como Coordinador del Consejo Estatal Para la Concertación para la Obra Pública del Gobierno del Estado, junto a Manuel Antonio Fimbres a quien se les decomisó un arma de fuego, porque, o ya fue excarcelado o en eso anda, igual que ocurrió con el caso del ex jefe de la Sagarpa estatal, Héctor Ortiz Ciscomani el que ya anda de nuevo de tours, por las Europas, disfrutando lo mal habido…
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