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Aparte de la nada agradable apreciación del mundo entero de que México es un país de corruptos, es muy lamentable el grado de cinismo social a que se ha llegado en muchos otros aspectos de la vida pública de este país.
Aunque muchos mexicanos vociferamos en el café, en la sala del hogar o en donde puedan escucharnos en lo bajito que estamos hartos de este sistema político dominado por unos cuantos dirigentes del país o de los partidos políticos, no vamos más allá de las palabras.
El ejemplo más claro son las elecciones presentadas en los últimos años. México presume de contar con uno de los organismos "ciudadanos" ejemplares a la hora de organizar, evaluar o enjuiciar los procesos electorales, pero la población se ha dado cuenta de que tanto los partidos en el gobierno como las instituciones electorales se tapan con la misma cobija a la hora de imponer autoridades.
Y la población acepta sin mayor rubor las sentencias de esos organismos, pero no se atreve a mover un dedo para poner un alto a tan alto grado de corrupción en materia electoral.
En las elecciones extraordinarias de Colima, desarrolladas este domingo precisamente porque provienen de otro proceso enturbiado por la ilegal participación de servidores públicos, se volvieron a escuchar las quejas de uno y otro partido sobre la aparición de boletas electorales ya marcadas a favor de los contrarios.
Pero para Lorenzo Córdova, consejero presidente del INE, en estos comicios hubo “incidentes menores.”
Me pregunto, ¿cómo va a ser algo menor el robarse la voluntad popular?
Pero, además, citó: “Es una jornada que no tiene problemas graves que lamentar y consecuentemente podemos definirla como exitosa, estamos en el tramo de la recepción de los paquetes; es un momento delicado, pero se han tomado las previsiones para que no haya incidentes mayores”, dijo.
Y fue más allá al hacer un llamado “para que candidatos, partidos, coaliciones y demás actores políticos del estado de Colima se apeguen escrupulosamente a las reglas del juego democrático”.
"Las reglas del juego (¿¿¿¿????) democrático". He ahí las palabra claves. Para los que están en el poder, el juego democrático consiste en que ganarán solamente quienes hayan sido "apadrinados" por tal o cual funcionario o dirigente de partido, de acuerdo a los arreglos, económicos o políticos, concertados entre los dueños de los bates y las pelotas de este "juego".
El caso Sonora
El 2015 vimos en Sonora la muestra de tales "reglas democráticas". Ganaron los agraciados que estuvieron siempre en la fotografía con Manlio Fabio Beltrones. Panistas incluidos. El chiste aquí fue que ganara el PRI la mayoría de Sonora a cambio de que a Guillermo Padrés Elías no lo encarcelen a pesar de toda la corrupción que Alí Babá y sus 40 (¿tan poquitos?) ladrones fueron capaces de ejecutar.
Ojalá y me equivoque, pero la moneda de cambio entre Beltrones y Padrés sólo alcanzará para tocar con la justicia a unos cuantos "charalitos".
Y a pesar de que muchos vieron cómo los despojaban de sus triunfos, jamás se escuchó de la boca de los perdedores una sola queja.
En otros tiempos, cuando ser de la oposición era una realidad, al menor intento de llevarse una urna provocaba toda una manifestación en las calles o la toma de oficinas electorales, sobre todo de parte de los panistas que eran los más golpeados por los mapaches electorales.
Hoy, el grado de cinismo social a que se ha llegado permite que ni actores políticos ni muchos medios de comunicación se atrevan a decir la palabra "fraude electoral" porque temen quedar mal con "San Manlio".
A ese corrupto político le tienen miedo priistas, panistas, perredistas y muchos otros, ya sea porque les conoce algo o porque, represor como es, puede mandarles una y mil calamidades para que sepan quién manda en Sonora.
Y con su parálisis arrastran a toda una sociedad a la apatía y el desinterés por todo lo que a política huela. Y por ello la sociedad no participa como debiera en los comicios y la vida pública, lo cual aprovechan los políticos para hacer y deshacer con la voluntad de los pocos votantes.
Hoy es tiempo de sacudirse de las sanguijuelas en el poder. Es tiempo de perder el miedo y el cinismo social porque eso es lo que permite a unos cuantos decidir por la gran mayoría.
Ojalá y ese despertar ciudadano comience pronto. México ya merece cambiar de imagen ante el mundo y que ya no seamos conocidos por el grado de corrupción que ahoga a este país en todos sus quehaceres.
En las manos y la acción de cada ciudadano está el destino de toda esta nación.
Hablando de corrupción
Como dirían los columnistas clásicos, en el tintero había quedado la queja de un ciudadano de Navojoa y la cual se la transmitimos tal como la envió para que los responsables de tomar soluciones vean cómo piensa el ciudadano común:
"Los que somos usuarios de Megacable fuimos notificados sobre el apagón analógico de las televisiones, con anticipación, y nos conminaban a pasar a sus oficinas por un equipo que sin él no íbamos a poder ver nuestros equipos, aun siendo televisores planas.
"Si uno tenía dos o varios equipos, la situación era la siguiente: por el primer equipo no le cobraban nada, por el segundo equipo le cobrarían 35.00 pesos mensuales, por el tercero, creo que 50.00; por el cuarto, 80.00 o algo así, argumentando que veríamos más canales por ese cobro adicional mensual.
"En mi caso, tengo tres televisores y únicamente compré aparato para el segundo. O sea, acepté tener un incremento en el cobro mensual de 35.00 pesos a fuerzas, porque no había de otra.
"Vine a mi casa e instalé uno nada más porque se me hizo más complicado el tener dos controles, uno para encender el televisor y otro para cambiarle los canales, además que los nuevos canales que me ofrecieron, ninguno valía la pena, eran casi puros de retaque. En los otros dos televisores no instalé el equipo con la consecuente amenaza que a partir del día 30 de diciembre se iban a quedar sin señal.
"Sin darme cuenta, pasó el 30 de diciembre, día de corte de la señal (analógica) y cuál sería mi sorpresa, que los dos televisores que no le había instalado el equipo seguían funcionando a la perfección.
"Conclusión: me sentí defraudado con el cobro adicional de 35 pesos que me van a hacer en el recibo de Megacable cada mes.
"Creo que vale la pena una investigación porque somos bastantes las personas defraudadas".
Aunque difícilmente a los directivos de esa empresa les interese, tengo a la mano los datos acerca de la persona que se queja, por lo cual cualquier comentario pueden hacerlo a franciscogonzalez.bolon@gmail.com.
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