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Antesala
En esta colaboración quisiera alejarme de los temas políticos. Más bien, deseo escribir acerca de los cajemenses distinguidos, una tradición iniciada en los tiempos de Armando Jesús Félix Holguín en la Presidencia Municipal de Cajeme.
Y nunca como ahora había estado tan de acuerdo en la nominación realizada por el Ayuntamiento en torno a la figura homenajeada: el doctor cajemense Juan Pablo Márquez Manríquez, orgullosamente investigador senior de la Universidad de Washington, nacido y criado en el Valle del Yaqui, en el block 602.
Cómo no mostrar agradecimiento y vanidad por contar entre los cajemenses a un científico que se ha dedicado a la prevención de tumores y del cáncer cáncer colorectal, cáncer de ovario y tumores recurrentes de mama en mujeres jóvenes.
Aunque no lo conozco personalmente, he escuchado que a pesar de su brillante trabajo y que desde 2002 ha trabajado como científico senior en el Tumor Vaccine Group de la División de Oncología de la Universidad de Washington, no es una persona engreída sino que conserva la sencillez que caracteriza a los habitantes de Cajeme, al contrario de muchos que llegan a un puesto, público o privado, y al subirse a ese ladrillo se marean y creen tener el mundo a sus pies.
De acuerdo con la hoja de vida mostrada durante el homenaje a Márquez Manríquez, se advierte que junto a otros doctores ha creado un programa académico binacional denominado CancerVac, para preparar a los oncólogos del futuro con un fuerte énfasis en la integración de la experiencia clínica y la investigación científica.
Además, es Director Académico del Centro de Investigación del Cáncer de Sonora (CICS) y en coordinación con éste y varias fundaciones trabaja en la creación del Vaccine Institute Project para desarrollar vacunas preventivas para los cánceres más prevalentes en el mundo.
Y sobre todo, destaca que uno de sus objetivos es hacer que Cajeme sea el eje central de la medicina oncológica a nivel mundial. Esta es la razón porque sus proyectos más importantes se basen en Ciudad Obregón.
Ahora sí que un gran reconocimiento al presidente municipal, Faustino Félix Chávez, por la elección de Márquez Manríquez como el Cajemense Distinguido 2015 y ojalá, desde su posición, el Alcalde haga todo lo posible por convertir a este municipio en un eje nacional y mundial de las investigaciones contra el cáncer y muchos otros males.
MARTÍNEZ CARRILLO
Hace unos días también, el XLI Simposio Nacional de Parasitología Agrícola fue distinguido con el nombre del Dr. José Luis Martínez Carrillo, un homenaje de la Asociación de Parasitología en México y la Organización Internacional Regional en Protección Fitosanitaria.
Es de esos honores a los que poco prestamos atención a veces, pero que significa en verdad un reconocimiento a todo lo que se hace en el Valle del Yaqui por obtener más desarrollo, ya sea en el agro, en la academia o en la vida cotidiana.
Durante 35 años, Martínez Carrillo trabajó como investigador del CIANO, como se le conoce a esa gran institución científica de México y con sede en Ciudad Obregón, en el cual desarrolló estudios como la resistencia de las plantas a enfermedades, el manejo integrado de plagas y la mosquita blanca, entre muchos otros.
Desde hace ocho años, este científico se ha desempeñado como maestro investigador del ITSON, cuyas autoridades ya le han brindado su reconocimiento, y desde ahí a impulsado diversas investigaciones, pero sobresale una en torno de la Diaphorina Citri que transmite el HLB o dragón amarillo que afecta a los cítricos y cuyas acciones se han convertido en ejemplo nacional para luchar contra ese problema que amenaza a la citricultura del mundo.
En 1992 recibió el premio "Edmundo Taboada", otorgado por el Patronato para la Investigación y Experimentación Agrícola del Estado de Sonora, por su contribución al conocimiento del manejo integrado de plagas en la entidad.
Durante 1993, 1994 y 2010, ha sido nominado como Maestro Distinguido por el ITSON y recibió un reconocimiento por Desarrollo Tecnológico y Transferencia de Tecnología a productores de México, de la Fundación Mexicana para la Investigación Agropecuaria y Forestal, en 2004.
Ha colaborado en proyectos de investigación como la "Actualización de variedades y fechas de siembra de algodonero en el sur del estado de Sonora, acorde al cambio climático"; el "Establecimiento de especies maderables de interés económico bajo riego en suelos agrícolas del sur de Sonora"; la "Validación de Tecnología para la producción de estevia en el sur de Sonora", y la "Evaluación agronómica de variedades de algodonero en el sur de Sonora. Ciclo agrícola Primavera-Verano 2010", entre otros.
Habría necesidad de muchas más páginas para hablar en torno a estos dos hombres de ciencia de los que los cajemenses debemos sentirnos plenamente orgullosos.
Ojalá y estos homenajes sigan por muchos años y que no pierdan la visión de rendir pleitesía a hombres y mujeres cuyo trabajo trasciende la inmediatez de los puestos públicos sino que dejan una herencia de especial relevancia para la comunidad.
