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El fin justifica los medios
Nicolás Maquiavelo (Florencia, Italia; 1469-1527)
“No soy rencoroso pero tengo buena memoria”. “Cuando juego, juego para ganar”. Frases atribuidas (¿?) al Lic. Manlio Fabio Beltrones R. (Col. Irrigación – Villa Juárez, Son. 1952)
A veces la práctica desvergonzada de la calumnia, la diatriba y el insulto, es utilizado en política para lograr llegar al poder, claro haciendo uso de medios de comunicación que sin recato se ($) prestan a ello, sin una objetividad informativa y precisa, que es lo que demanda una población ciudadanizada; que se le hable con la verdad. Esto se observó en el pasado proceso electoral y los protagonistas no dejaron, recíprocamente “chivos sin mecate”; en forma abierta recibieron acusaciones de toda índole, sobre todo de malos manejos de los recursos públicos.
Lo suspicaz es que una vez pasado el proceso electoral, los beneficiados de las contiendas siguen atizando el fogón “polaco” con miras en las futuras elecciones (2018) y sacar tajada y siguen enyerbando a la ciudadanía con verdades a medias, que pueden ser mentiras o no. Pero las estancias legales que deben de juzgar esto no actúan o nadan de muertito, según sea el cañonazo ($) que los
Generales de los “ejércitos o partidos” les dirigen. Como diría el General Obregón, en épocas “robolucionarias”, vigente en la actualidad –lo robolucionario-pero ahora no son miles, sino millones de pesos: “Nadie aguanta un cañonazo de 50 mil pesos”. Ahora el calibre ($) de la bola de cañón es más grande. Actualmente “LOS MEDIOS JUSTIFICAN LOS FINES”. (Hay honrosas excepciones…como aguja en un pajar).
Canibalismo puro, que en política encaja perfectamente en la definición de esta palabra: “crueldad o ferocidad extrema de una persona con sus semejantes, en especial en el terreno político”.
Pero tal parece que los encumbrados políticos son masoquistas, gozan con ese “cruel sufrimiento incriminatorio” que se aplican entre ellos. Quizás ese “sufrimiento” lo palian o soportan con la remuneración económica que se allegan, para calmar ¡TANTO DOLOR PSICOLOGICO! (si pues).
El canibalismo político, no solo se da entre los distintos partidos políticos, sino también dentro de los mismos: La lucha de grupos internos del PRI, la fragmentación de los partidos de “izquierda”, PRD, PT, etc., en ese rio revuelto ganancia de pescadores, o “López Obradores” (MoReNa) y no se diga dentro del PAN donde la onda grupera que llegó desde el 2000, mayoritariamente del PRI, no “hacen mal los quesos”, y también sufre las consecuencias del divisionismo partidistas por la hordas del poder. No cabe duda que el poder absoluto, corrompe absolutamente.
A Séneca el filósofo romano, se le atribuye esta frase: “El poder apesta”. Más el poder político, por eso a muchos políticos les gusta comer eso que tanto hiede, sin hacer gestos. Dicho popular modificado.
Cuando un político o un funcionario público hace mal uso de los recursos del estado, todo mundo estaremos de acuerdo que se le demande, se le investigue, que se le juzgue y reciba un ejemplar castigo; y no hacer juicios de mitote a través de medios “chismográficos”, caricaturescos utilizados por algunos de estos, que se acomodan (de ha como NO), según el político de moda.
Si un gobierno que se jacte de ser trasparente u honesto en la administración de los recursos de la nación, debe poner el ejemplo, empezando por ellos mismos.
Si hay pruebas que fundamenten actos de corrupción, es el momento de demostrarlo jurídicamente previa demanda. Antes cuando solo ejercía o usurpaba el poder un solo partido, esas corruptelas se ocultaban y “todos” tranquilos o como el chino “copelas –silencio- o cuello”. Ahora con la alternancia, hay contubernios.
En política, aun en la alternancia a veces coincide que “se alineen los astros” y así se podrían hacer las cosas con mejor trasparencia o se ocultan mejor. A nivel Estado (Sonora) están en línea el Ejecutivo Nacional-Estatal y algunos municipios. ¿Qué no es más fácil y rápidamente resolver los actos de corrupción con verdadera voluntad y honestidad jurídica”?
Si hay culpa que se les castigue como dicta la ley. Si hay que meter a la cárcel a los culpables ¿Quién cerrará las celdas?
El buen juez por su casa empieza.
#PARACAMBIARYOMEINCLUYO.
Les saludo con afecto.
Dr. Raúl Héctor Campa García.
raulhcampag@hotmail.com
México, D.F. 4 de diciembre de 2015
