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Detrás de la Silla Presidencial está el Secretario de Hacienda, Luis Videgaray. El mexiquense tiene más influencia en las decisiones del mandatario federal que ningún otro funcionario de su gabinete o fuera de él.
Incluso hasta al secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, Videragay le ha dejado ver su suerte. Mucho se ha comentado en radiopasillo que fue el propio titular de la SHCH quien soltó los demonios que se desataron, luego de que el hidalguense alcanzó el estrellato al hablar con los politécnicos en mangas de camisa en las afueras de la Casona de Bucareli.
Resulta que para el asunto del futuro político de Manlio Fabio Beltrones, el sonorense pasó primero este lunes por la oficina de Luis Videgaray, antes de hablar con el mismo Peña Nieto, con quien se reunirá este martes.
Y es que el secretario Videgaray determinará donde se le colocará a Beltrones pasadas las elecciones y concluida la legislatura LXII en la Cámara de Diputados.
La decisión está difícil para el mexiquense. Deberá optar entre ceder ante la petición de Beltrones de dirigir el CEN del PRI, lo que implica abrirle paso al sonorense a una posible candidatura presidencial rumbo al 2018, y una amenaza real a las intenciones del grupo Atlacomulco, el que buscará ocupar la misma candidatura llegado el momento.
La otra es enviar a Beltrones como embajador; lo cual lastimaría la imagen ya tan vilipendiada del presidente Peña Nieto.
Cierto que Manlio tiene sus méritos y se ha ganado honrosamente un lugar en los mejores lugares del gabinete o como dirigente del CEN, ya que gracias a su operación y labor política, el PRI logró repuntar en el marcador de las pasadas elecciones.
Pero en política no se trata de méritos, sino de simpatías y confianzas, y resulta que el sonorense no es parte del equipo peñista. Veremos en las próximas horas cómo se acomodan las piezas.
Los delirios de Margarita Zavala
El anuncio de Margarita Zavala de que buscará la candidatura del PAN a la presidencia de la República, no se puede ver de otro modo que como delirios una ex primera dama que no hizo nada sustancial ni de provecho para los mexicanos mientras compartió con Felipe Calderón la residencia oficial de los Pinos.
Toda esa gran labor social que dice ahora buscará hacer de llegar a ser la titular del ejecutivo federal no lo hizo cuando ocupó la presidencia, pero del DIF; donde bien pudo haber probado sus habilidades, buenos oficios y buena voluntad de servir a los ciudadanos, y muy en particular a la población más vulnerable como es la infantil.
Pero no, no se vio nada de eso, por el contrario, dejó pasar tantas atrocidades cometidas por el entonces presidente Felipe Calderón (2006-2012), tal como la guerra contra el narco; la que le sirvió al michoacano no para combatir el flagelo que ha debilitado a México, sino para favorecer al cártel de su preferencia.
Y como bien dice el dicho: tanto peca el que mata la vaca, como el que le jala la pata. Y esa que jaló la pata a México se llama Margarita Zavala de Calderón.
