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Pues por lo visto a Manuel Espino no le alcanzaron ante Calderón y los miembros de la Comisión de Justicia del PAN los bonos y los méritos para haber librado el juicio que los azules le iniciaron aquí en Sonora ya que, como se vio, finalmente terminaron echándolo a la calle, expulsándolo del partido del que fue dirigente estatal y nacional y del que a través de sus colores llegó a convertirse en diputado federal.
La expulsión del hombre que jugó un papel importante para que Adalberto Rosas abandonara las filas del PAN en Sonora se constituye en un referente que habrá de perdurar por largo tiempo en la vida de Acción Nacional por cuanto a que, con su corrida, Espino se convierte en el primer ex dirigente nacional de un partido que es echado de sus filas de la forma más ignominiosa posible y para cuyos verdugos no valió en lo más mínimo su larga y productiva trayectoria en la que habría que abonar como la más importante el que durante su liderazgo se dio el segundo de los triunfos del PAN que le valieron quedarse al frente del Poder Ejecutivo Federal.
Para Calderón, por lo visto, poco valieron las negociaciones de Espino con el equipo de la maestra Gordillo y que el chihuahuense haya hecho los amarres necesarios con algunos gobernadores priistas que le voltearon la cara a Madrazo y trabajaran a favor del ahora Presidente. Tampoco le contó lo suficiente a Espino la campaña de erosión que emprendió en combinación con el PRI para debilitar a López Obrador bajo la premisa de que más valía que los votos negados al PAN fueran a parar al PRI y no a favor del tabasqueño.
Todo hace suponer que Calderón no le perdonó nunca a Espino el que se la haya atravesado como el candidato de Fox para alcanzar la dirigencia nacional del PAN y sus constantes críticas a su gobierno, amén de la destapada de cloaca en la que exhibió las corruptelas de algunos distinguidos panistas incrustados en algunos gobiernos estatales bajo los colores del albiazul.
De hecho, para más señas, Espino se convirtió en el primero de los opositores y críticos a la guerra que sin ton ni son emprendió Calderón en contra de un enemigo que, por lo que se vio, subestimó en cantidad y alcances para haber convertido a México en la tierra sin nadie que sigue siendo en algunos estados de la república en donde prácticamente son amos y señores.
Le queda, por supuesto, al ex dirigente de la Organización Demócrata Cristiana el último recurso de asistir con su queja e inconformidad ante el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación y en el último de los casos que al asunto se postergue hasta finales de año del 2012 tiempo en el que seguramente ya sabremos si el PAN y Calderón se quedan un tiempo más en los Pinos.
Por lo demás, Espino sabe que ya no tiene nada qué hacer en las filas de su ahora ex partido, independientemente de lo que dijera el fallo del TEPJF, por lo que, aquí entre nos, no les arriendo las ganancias a Calderón y aquellos funcionarios de su primer circulo, por una razón; al irse Espino del PAN, se lleva un cúmulo de datos, cifras, mañas y estrategias y la información, ya se sabe, es poder que a veces abre grandes puertas y descalabra inmensas fortunas. Ahí se las dejo.
FIERRITOS EN LA LUMBRE
Más le hubiera valido al rector del Itson, Gonzalo Rodríguez Villanueva no haber sacado la cabeza en un intento de aclarar la serie de enredos que se han venido dando hacia el interior de la llamada máxima casa de estudios de Cajeme y en la que han salido a relucir, además de las muchas solicitudes de auditorias y hasta el regreso de Oscar Russo, algunas preguntas como estas de parte de la comunidad universitaria en la que le cuestionan a Rodríguez Villanueva el hecho de que tenga trabajando a gente que ha sido amonestada constantemente por violar leyes y reglamentos como son los casos del director de Recursos Naturales, Luciano Castro y del vicerrector académico quien también merece sanción por lo mismo, según estos.
Y, en más de talibanadas, ¿suponiendo sin conceder que Osama Bin Laden organizó y ejecutó en todos sus términos los ataques de las Torres Gemelas del once de septiembre del 2001 en el que habrían muerto miles de estadounidenses y es además el orquestador de los atentados en la estación del Metro en España y en todos los demás ocurridos en el mundo occidental con otros cientos de muertos, se vale— es la pregunta—que sin mediar juicio alguno y que, luego de haberlo liquidado, sin mayor explicación, alguien decide que su cuerpo debe ser arrojado al mar?
¿Así de sencillo?.
O ¿bajo qué términos o tratados internacionales se arroga el gobierno de Obama una determinación de este tamaño?
¿Qué dice en este sentido el Derecho Internacional Humanitario dependiente de los Convenios de Ginebra?
Desconozco si los referidos tratados contemplen también el caso de los terroristas capturados ( vivos o muertos ), como seguramente es el caso de Osama Bin Laden, pero de cualquier forma siento que al respecto de la muerte y secuestro del cuerpo del líder de Al Qaeda, los Estados Unidos aun tienen mucho qué decir al respecto.
Se trata, quiérase o no, de un personaje cuya historia criminal y paso por este mundo le hace difícil de desaparecer de escena, cual si se tratase de un torpe y desconocido asesino que cae en manos del alguacil del pueblo luego de un nutrido intercambio de balazos.
¿Qué no habría sido lo justo darle el gusto a la plebe trayéndolo de regreso al pueblo en donde hizo tanto daño y mediante juicio sumario haberlo condenado al patíbulo, como ocurría en los salvajes tiempos del viejo oeste en una suerte de “ habeas corpus”, o lo que es lo mismo, “ traedme el cuerpo”, según la traducción literal y el significado que se le daba en la antigüedad a lo que ahora conocemos como los derechos fundamentales derivados de la vida y la libertad frente a cualquier acto u omisión de cualquier autoridad, funcionario o persona, que pueda vulnerar dichos derechos.? Y, finalmente, qué estará pensando en estos momentos el juez calificador de Seguridad Pública de Cajeme Cristian Gutiérrez que de tiempo atrás había venido abogando por las vagancias del tipo que, ayer se supo, asesinó al padre de su novia?
¿Te acuerdas, abogado, cuando te advertí ahí en seguridad pública, la clase de monerías que andabas defendiendo y que el tipo en cuestión, Francisco Colmenero, finalmente acabaría por enseñar el cobre?. Pues con todo y eso, nos cuentan que ayer se le vio al abogado litigando a favor del sujeto de marras por rumbos de la Procuraduría aun cuando está impedido por ley, debido a su condición de funcionario público. Será?. Qué tendrán que decir al respecto sus jefes directos el ahora ex secretario de Seguridad Pública, Víctor Landeros y el Secretario del Ayuntamiento, “el todas mías”, caduco petimetre, Luis Alberto Plascencia Osuna?
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