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Pues como buenos deseos, no está mal, pero eso de que la guerra que desató la escasez de agua en el Estado quedó en el pasado, como se asegura en la información que hizo circular ayer El Universal, como que está en veremos. Al menos eso es lo que se deduce luego de las encerronas de a piedra y lodo en las que han estado los agrotitantes del sur del estado y tras las declaraciones hechas ayer mismo por los integrantes del Movimiento por el Agua, encabezados por Adalberto Rosas, Jaime Miranda y su vocero, Alberto Vizcarra, cuando al referirse del supuesto aval que habría dado la Conagua para el inicio de las obras del Sonora SI, estos aseguran que solo se trata de un intento de presionar a Calderón. Menos, se pudiera pensar que el estado de alerta en que se hallan los agricultores del sur del estado ha vuelto a la normalidad cuando vemos que las mujeres integrantes al mismo movimiento están anunciando una manifestación para el próximo viernes de enfrente, mientras que por otra parte, no se descarta la marcha con rumbo a Hermosillo a efecto, dicen ellas de exigirle al Congreso del Estado la comparecencia del Director de la Comisión Estatal del Agua y del mismo Padrés, para que expliquen de dónde saldrán los recursos fiscales para la construcción del acueducto Independencia. Pero hubo además, durante la conferencia de prensa de las féminas, un detalle del tamaño de una perla que como tal no merece el menos desperdicio; se trató de la presentación a los medios del corrido “ No al Novillo”, interpretado, ni más ni menos que por “Los Rajones de Sonora”!. Como diría el siempre afable Cuervito Zamora, en sus gustados apuntes, “ No te oigo, traes tenis”!...La indirecta, por supuesto, incluye su respectiva dedicatoria y tiene que ver con algunos personajes políticos de la localidad que entraron muy felones a la defensa del agua y hoy se conducen cual mansos corderitos, con rumbo por supuesto, a la elección que viene y en la que ya empiezan a apuntarse para lo que sea al fin que para todo son buenos, hasta para cambiar de color y convicciones en cuestión de segundos. Para estos, el partido y las siglas es lo de menos cuando se trata de subirse al carro de la alegría, así se trate del PUP o del CRAC!.
FIERRITOS EN LA LUMBRE
En relación a la carta que publicó TRIBUNA en su edición de este pasado jueves 29 de los corrientes y en la que Víctor Landeros, el jefe de Policía, al salir en defensa de sus agentes, señala al columnista de acusador de sus muchachitos, tengo a bien hacer las siguientes aclaraciones: Para empezar, la denuncia, que no acusación, es totalmente cierta y se halla radicada ante la Oficina de la Comisión Estatal de Derechos Humanos, aquí en Cajeme. ¿Que el comentario es negativo? Por supuesto que lo es, pero esto no lo determina el columnista, sino el hecho en si porque involucra a personal de Seguridad Pública en una denuncia que no es promovida por Juan N o por el vulgo; es una denuncia de hechos con nombres y direcciones. ¿Que son agrios los comentarios y esto no gusta a su excelencia? Bueno, quién dijo que la Dirección de una gendarmería de la importancia de Cajeme habría de ser como una tarde de verano a las faldas del Bacatete, dando cuenta de unas ricas panelas acompañadas con sendas tortillas sobaqueras? Y ni modo de hacerle al Amado Nervo, para decirle al pueblo o al mismo alcalde; “Manolo, nada te debo, Manolo, estamos en paz”. No, los asaltos que siguen a la orden del día exigen una mayor entrega de quienes integran el cuerpo de la gendarmería y no hay momento para los lloriqueos. En lo que al columnista respecta, la verdad, no tengo mucho que aclarar pues en su carta, el mismo señor Landeros confirma lo que hemos venido manejando en nuestros pasados apuntes y que reseña en tres puntos: se efectúa un asalto a la Gasolinera Servicios 300, se detiene a los asaltantes horas después del atraco con todo y botín y, aquí el pero; al momento de sacar las cuentas, estas no salen pues mientras los policías afirman que se trató de un botín de 160 mil pesos y el mismo Landeros dice que se trata de 145 mil, según el arqueo final, las esposas de quienes ahora se hallan recluidos afirman que es una mayor cantidad. Hasta aquí las cosas. Además, si como afirma en su carta el señor jefe de policía, el asunto ya se encuentra en manos de la autoridad respectiva, es decir, Ministerio Público y el juez de la causa, ¿pues para qué tanto brinco?. Por cuanto a los motes de que habla don Víctor, la verdad es que me recuerda la ridícula participación del ex candidato del PRI a la presidencia, Francisco Labastida, ante Fox, cuando se puso a ventilar en mero debate, un asunto sin trascendencia, como aquello de, “Me dijo Labestida, me dijo Mariquita, me dijo la Viki, etc”, cuando tampoco viene al caso, menos, cuando al decir de Landeros, resultan impublicables. Cierto don Víctor, en defensa de su honor y en reciprocidad a su fina postura de no dar a conocer el remoquete con el que se le conoce al columnista y que haría que doña Balvanera cayese de nuevo víctima de artero soponcio, me reservo los otros dos que andan entre la tropa. Sin embargo, no paran aquí las cosas. La terca costumbre de reportero me llevó a entrevistarme ayer, precisamente, con uno de los hermanos de uno de los detenidos e involucrados y cuyo nombre me reservo de momento por aquello de no te entumas y a solicitud de parte, y ¿qué cree?. Al señor le parece inexplicable como en cuestión de horas, su hermano se da tiempo para irse de compras al Walmart, adquirir por ahí una televisión pantalla de plasma y hasta para irse a depositarle a sus parientes que viven fuera de la ciudad. Lo que sí le parece inexplicable al señor es que, cuando van a su casa los señores agentes (ojo, esto dicho y declarado por él, que no por el columnista) a recoger los supuestos artículos producto del dinero del robo, se “ pierden”, una serie de artículos electrónicos que nada tienen que ver con el robo en cuestión y que eran de su propiedad y sobre eso ya obra también una denuncia ante el Ministerio Público a instancia, dice el señor, del mismo agente del Ministerio Público, “porque no es posible solapar tanto abuso”, dice que le dijo. Y sobre esto y otras declaraciones del mismo señor y las esposas de los acusados estaremos hablando en los próximos apuntes, con nombres, pelos y señales, para que no dejar lugar a dudas. Que son negativos, pues si. También es negativa la denuncia que el señor Mario Alonso Chávez, vecino de Esperanza hace en contra de la policía de Esperanza y de su jefe el señor Juan Carlos Arreola al que acusa – el señor en referencia, no el columnista ni el reportero que toma nota de la acusación— de haberle robado 16 mil pesos. ¿Que estos asuntos resultan negativos a la corporación?, pues sí, pero no son comentarios, son afirmaciones, señalamientos que hacen los directamente implicados en ambos casos. Es cuanto.
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