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Más claro ni el agua: “Ni una gota de agua le será robada al Valle del Yaqui”: Guillermo Padrés.
Pues a juzgar por las declaraciones que en conferencia de prensa y que en lo corto hizo ayer el gobernador Guillermo Padrés, en su visita a Cajeme, ni una sola gota de agua del Valle del Yaqui será tomada para ser llevada a Hermosillo ni a ninguna otra región del estado. Y aclaró dos cosas más: “En vez de eso, se comprarán algunos derechos de agua a productores del centro del estado. De frente a los cajemenses, les digo que no se tomará ni una sola gota de agua del Yaqui", reiteró. La segunda aclaración fue: “Mienten aquellos que insisten en decirle a la gente que nos vamos a llevar el agua del Valle del yaqui”. Ya en corto, tanto el columnista como otro colega de un diario capitalino insistimos en el tema: ¿Esto quiere decir que no habrá acueducto el Novillo?
Y la respuesta, acompañada de una socarrona respuesta del mandatario fue siempre la misma, ante la doble y hasta triple insistencia de los reporteros:
-Ni una sola gota de agua del Valle del Yaqui será tomada para llevarla a otra parte.
-Esto quiere decir…
-Ni una sola gota de agua le será quitada al Valle del Yaqui.
Dicho esto, el de Cananea abordó el autobús “Alvaro Obregón”, acompañado de su corta comitiva de funcionarios, la diputada Eloisa Flores García y el alcalde Manolo Barro Borgaro.
Lo anterior, lo había manifestado momentos antes en su oportunidad al micrófono y en donde dio a conocer la millonaria inversión de 340 millones de pesos para Cajeme. Posteriormente a esto, gobernador y alcalde darían el banderazo de salida a los trabajos de ampliación de la calle 200, a partir de la Kino, con rumbo al poniente de la ciudad y hasta donde ha llegado ya la mancha urbana de Cajeme.
Al respecto de los derechos de agua que están siendo adquiridos por parte de la Comisión Estatal del Agua y su titular, Enrique Martínez Preciado, todo hace pensar que tanto él como el dirigente estatal del PA,N Juan Valencia Durazo, tendrán mucho que decir a la opinión pública y en un descuido, ante la propia soberanía popular, toda vez que para todo mundo sigue siendo un enigma la participación del dirigente del PAN en un acto exclusivamente de gobierno como es la adquisición de estos derechos de agua y por los que la CEA está haciendo una erogación, hasta la fecha, de 30 millones de pesos.
Volviendo con el acto de arranque de obras encabezado por Padrés, ayer al mediodía, la parafernalia sigue siendo la misma; música de mariachi para ambientar el ambiente previo al arribo del mandatario, y a su llegada, como en otros tiempos ocurrió con Félix Valdés y su Pilareña, ahora el tema de moda es “La cárcel de Cananea” y algunos otros temas que, sin duda, han de ser del gusto del ejecutivo estatal.
Y, claro, los infaltables políticos del momento, listos, prestos a la menor insinuación de llamado o saludo del Tlatoani en turno. Ni una sola camisa colorada. Puro azul pintaba el panorama en el que a lo lejos se escuchaban los atronadores abrazos, espalda y compromiso de por medio.
Sonrisa al canto, dos tres palmadas y la cita quedaba amarrada: –Mañana no, tú sabes, es viernes, fin de semana; échame una llamadita, antes.
De los más buscados, saludados y saludadores; Carlos Villalobos Organista, en su calidad de tesorero del Estado; José Luis – Desarrollo Urbano—Palafox Núñez quien demostró que no es hombre de muchas palabras, a la hora de enfrentar al cacarizo. La obra tiene un costo de tanto y la construye fulano de tal. Es cuanto, señor Gobernador. Y de nuevo al presidium.
De los locales como siempre ocurre, el custodio del erario municipal, el ingeniero José Enrique Ángeles Castañeda, de los más saludados, serio, sin llegar a lo solemne, de fino y cordial trato, capote en mano, por aquello de un que otro espontáneo que se aparezca en el ruedo; el líder del PAN y regidor, Héctor Rodríguez Camacho lo mismo que el síndico municipal, Jorge Russo, mientras que el fuerte sexo débil era representado por la diputada Eloísa Flores la que siempre lució y posó al lado de alcalde y gobernador.
FIERRITOS EN LA LUMBRE
De nueva cuenta el síndrome del miedo y la zozobra campean sobre cielo cajemense luego del descubrimiento de los dos ejecutados, ocurrido ayer por la mañana. Hasta el cierre de la presente edición no se habían podido identificar a las víctimas, aunque extraoficialmente se hablaba de que podrían ser oriundos de la vecina comisaría de Cócorit.
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