Quiere permiso para que entren a territorio mexicano soldados gringos; avivó en Panamá la plaga del gusano barrenador para tener el pretexto de cerrar la frontera al ganado mexicano; ha clasificado a los narcos como terroristas para colarse en nuestro país como abanderado de la justicia. Su mente enferma le aconseja invadirnos, igual que a Canadá, para convertirse en emperador de América del Norte.
Pero lo último es monstruoso. Los gringos pretenden cobrar un impuesto a las remesas de dinero que los trabajadores mexicanos que allá laboran mandan a sus familias acá, a nuestro lado.
¡Esto es la guerra!
Hipócritas. Se asustan de que los judíos lancen bombas sobre hospitales y escuelas de Gaza y asesinen niños palestinos. Aquí preparan el asesinato de niños mexicanos pobres al limitar, y pronto suprimir, el envío de remesas. Reprueban el narcotráfico y crean las condiciones para que los adolescentes y jóvenes pobres, al verse privados de las remesas, se conviertan en narcotraficantes.
Esto es la guerra y tenemos el derecho de defendernos. Si viene por aquí un turista o un hombre de negocios o un artista gringos, no los consideremos amigos. Si no reprueban la agresión de Trump, desconfiemos de ellos. Consideremos cómplices a quienes les estrechen la mano o acepten un trago de ellos. ¡Esto es la guerra!
MAÑANA SÁBADO
Presentarán en El Estanquillo de las Letras, a un costado del kiosco de la Plaza Zaragoza, los números 5 y 6 de la revista de literatura “Voces Sonhoras”. A las 7 de la tarde, cuando mejora el clima. Asistencia libre.
carlosomoncada@gmail.com