Sí, se presentaron en la cancha, pero no jugaron en los primeros minutos. Veracruz protestó en silencio y como los jugadores locales no participaron, permitieron dos goles de Tigres.
Algo sin precedentes sucedió en la Jornada 14 de la Liga MX.
La situación de la falta de pagos llegó a su clímax esta semana, incluso la Asociación Mexicana del Futbolista había fijado que la postura del equipo era la de no jugar esta noche, sin embargo, en los días siguientes, el presidente de la Liga MX había advertido que, si el equipo no se presentaba, podría ser desafiliado. Este día, parecía que se había llegado a un principio de solución, pero no.
Después de irse dos goles abajo, con un par de anotaciones desganadas de Tigres, los jugadores se pusieron a jugar, quizá sabedores que el rival no se iba a detener.
El primer minuto de juego, Tigres se solidarizó con Veracruz y no hizo or competir, pero en el segundo movieron tímidamente el esférico y tiraron desde lejos, quizá esperando que el disparo fuera detenido por el portero, sin embargo, tanto el gol de lejos de Eduardo Vargas (2’), como el de Gignac (4’) no fueron contenidos por los jugadores ni por el arquero Sebastián Jurado.
Veracruz, molesto con Tigres por su falta de solidaridad (en los reportes de televisión se decía que Tigres estaba enterado de esta protesta que solo duraría cuatro minutos), compitió después, pero recibió un tercer gol (de Vargas) a los ocho minutos del encuentro.
¿Era la mejor manera de protestar para Veracruz? ¿Tigres no debió tirar al arco contra un rival inerte? ¿El árbitro debió detener el juego? ¿Se faltó el respeto a la afición? Da la impresión que las cosas pudieron hacerse mejor.