DESDE Los Ángeles, California, se escuchó la voz del manejador mexicano Tony Rivera, el cual expresó que aceptó una oferta para entrenar peleadores de un personaje que se ha metido de lleno en el pugilismo. Se trata de Curtis Jackson, mejor conocido como el rapero 50 Cent.

Curtis Jackson, quien posee una inmensa fortuna por su trabajo en el mundo de la música, es un apasionado del boxeo, es el apoderado del cubano Yuriorkis Gamboa y tiene una respetable cuadra de peleadores profesionales y amateurs.

50 Cent ha tomado como base de operaciones Las Vegas, donde está por inaugurar un gimnasio a todo lujo, muy cerca del que tiene la empresa Top Rank.

Jackson se puso en contacto con Rivera, el cual aceptó su oferta para entrenar peleadores y buscar talento mexicano con guantes para ser promovidos por Jackson.

El rapero platicó con Rivera y le dijo que está convencido de que el éxito del pugilismo en el sur de Estados Unidos son los peleadores mexicanos, es por eso que está dispuesto a pagar "lo que sea" por tener muchas estrellas aztecas del ring.

Considerado el mejor rapero del mundo, 50 Cent es también accionista, empresario y actor, y ganador del prestigiado premio Grammy.

Si existiera la lógica, Curtis Jackson debería estar muerto, ya que hace unos años, en un asalto, un tipo llamado Darryl Baum lo asaltó y le disparó nueve balazos con una pistola de 9 milímetros. Los tiros le dieron en las piernas, en la cadera, en los brazos, en el tórax y en la mejilla izquierda, pero sobrevivió. Baum, quien se pudre en la cárcel, era guardaespaldas de Mike Tyson.

Ahora 50 Cent, recuperado totalmente de esa balacera, es un triunfador y busca dejar huella en el boxeo.