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Como una forma de apoyar el fortalecimiento espiritual al interior del Centro de Reinserción Social (Cereso) de Cajeme, Personas Privadas de su Libertad (PPL) participaron en la construcción de una capilla al interior del mismo, donde se oficiará periódicamente misa y podrán acudir quienes así lo deseen, informó el director Jorge Arturo Argüelles.
El responsable del Cereso de Cajeme comentó que con una solemne misa impartida por el Obispo Felipe Pozos Lorenzini, fue inaugurada la capilla de Adoración Perpetua y fue bendecida la Cruz del Apostolado.
Argüelles Valdez explicó que internos con conocimientos en la construcción participaron activamente en la edificación del inmueble, en el cual pusieron su mejor esfuerzo, por lo que reconoció su trabajo y la colaboración de integrantes de la sociedad civil para hacer posible la construcción de la capilla en el Centro de Reinserción Social.
Luego de asegurar que son respetuosos de las creencias religiosas de la población, reconoció la importancia de contar con espacios donde puedan encontrar un refugio de paz y oración.
El Obispo Felipe Pozos Lorenzini, durante la misa inaugural compartió que “desde este día, ya no son 1200 hermanos internos, sino 1201, Jesús también cuenta, él es el interno de máxima seguridad”.
En la misma ceremonia, dos personas privadas de su libertad fueron consagrados como ministros extraordinarios para la Comunión para que puedan proclamar diariamente la Palabra de Dios y distribuir la ostia a las personas privadas de su libertad que estén preparados para recibirlo
