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La designación de César Reynoso como dirigente interino de Morena en Cajeme fue cuestionada por un grupo de militantes de este partido quienes calificaron la medida como "una imposición para fortalecer al grupo de Javier Lamarque".
José Guadalupe Hernández Nevarez dijo que era una falta a los estatutos del partido, en particular a los artículos 3ro. y 6to.
Reynoso no tiene el perfil y no cumple los requisitos para ser dirigente municipal, además su designación se hizo sin el consenso de todos los grupos que integran esta organización, señaló.
En términos similares se expresó Armando López Varela quien mencionó que antes se habían dirigido a Mendoza para expresarle la necesidad de participar, por eso se rechaza la falta de una consulta con los militantes.
"César Reynoso es una excelente persona pero ése no es el punto, yo creo que había varias opciones que pudieron ser consultadas", puntualizó.
Por su parte Severo Castro Paz resaltó que "no podemos tener a un partido dividido, pero tampoco debemos tener un partido donde no sea pareja la democracia, la decisión no puede ser de ocho personas que pertenecen a un solo grupo".
"Yo te pido Jacobo que utilices ese amplio criterio para calificar que nosotros queremos una democracia abierta y clara y que hable del sentir de todos nosotros", puntualizó.
En respuesta, el dirigente estatal Jacobo Mendoza reiteró que la designación de Reynoso fue aprobada por el consejo directivo nacional.
"Estamos actuando con libertad y democracia y si usted no está de acuerdo respetamos su decisión pero no puede desconocer la decisión del consejo directivo", añadió Mendoza.
