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Sin ningún control y ante la vista de policías que merodean en el exterior del estadio, los revendedores de boletos para la serie de campeonato entre Yaquis y Charros realizan su actividad sin reservas, ofreciendo abiertamente su mercancía a los aficionados que no alcanzaron a comprar boleto en las taquillas.
Los precios oficiales, ya de por sí demasiado altos, tienen aumentos arbitrarios a gusto del revendedor y a costa del aficionado que no se quiere perder estos partidos.
A través de redes sociales el público ha manifestado su enojo, el malestar que experimentan por el exceso de boletos que se distribuyeron entre revendedores. ¿Cómo es posible que a una sola persona le vendan diez o más boletos?, preguntan.
La mañana de este jueves solo se vendían boletos para la terraza del juego del sábado, cuyo costo es de 300 pesos. Algunos aficionados acudieron a las taquillas, pero se retiraron molestos al conocer el precio de los boletos.
Otros se acercaron a los revendedores que estaban en el lugar y que ofrecían al doble del costo normal del boleto: Sombra general pasó de 180 a 400 pesos y bleacher que vale 100 se vendía por 200 pesos.
De acuerdo con el Artículo 25, Fracción XI de la Ley de Cultura Cívica del Distrito Federal, está prohibido “ofrecer o propiciar la venta de boletos de espectáculos públicos, con precios superiores a los autorizados”. Y aunque la reventa no es un delito como tal sí amerita una multa o un arresto temporal.
Claro, esto es en el D. F., porque aquí en Cajeme solo se trata de una muestra más del estado de indefensión en el que se encuentra el público.
Generosidad limitada
Por ota parte se dio a conocer que los 1,000 boletos que el Club Yaquis dona al Ayuntamiento de Cajeme como parte del pago de la concesión del nuevo estadio, sólo son repartidos en la temporada regular. Es decir, cuando la afluencia a los partidos es muy baja y ni siquiera asisten los supuestos mil beneficiarios.
Para las series de play off y esta de campeonato, no hay tal "generosidad". Los boletos de bleahcers se venden hoy a 100 pesos, y una gran parte de los disponibles están en manos de la reventa.
La pasada administración municipal encabezada por Faustino Félix Chávez hasta con eso benefició a sus amigos de la directiva de los Yaquis.
¿Privilegios excesios o capitalismo de cuates?
