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Entre la ineficiencia del Oomapasc, la negligencia de los vecinos y la mala calidad de los materiales, se multiplican en Cd. Obregón las fugas de agua que dañan en forma severa la infraestructura urbana.
Las consecuencias son los gastos mllonarios en reparación de instalaciones hidráulica, obras que dañan a la población pero tienen un enorme beneficio para los amigos de las autoridades que se encargan de reparar los daños.
Así, entre negligencia y corrupción, se ven a diario en nuestra ciudad los casos como el rompimiento de una tubería que ocurrió en la noche del sábado y seguía sin ser reparada al momento de tomar la foto, el domingo por la mañana.
El lugar es la esquina de las calles Mártires de Cananea y Villahermosa, en la colonia Primero de Mayo, pero igual podría ser en los múltiples sectores de la ciudad donde a diario ocurre esto.
El desastre ambiental no es solo el calentamiento de la tierra y otros temas que los políticos juran que van a enfrentar.
Esto también es desastre ambiental y al parecer a nadie le importa, excepto cuando ocurre cerca de la casa de un funcionario o cuando las denuncias repetidas en los medios de comunicación afectan la imagen de la autoridad.
