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Después de platicar con alcaldes, gobernadores, funcionarios y en general militantes del PRI en diversos estados del país, la mayoría reconoce que es muy probable su derrota en la elección presidencial del 2018, afirma Erick Guerrero Rosas.
Una causa directa de este derrotismo es la crisis económica que vive México al no haber cuajado las reformas estructurales tan pronto como se esperaba, explica el analista económico de TV Azteca antes de iniciar su conferencia en el Centro Magno, evento organizado por la Canacintra local.
Al inicio del sexenio de Peña Nieto, amplía Erick Guerrero, se esperaba que las reformas estructurales se reflejaran en un crecimiento económico antes del 2018, había confianza de que esto sería así.
"Pero en los meses recientes, cuando platico con priistas de diferentes lugares del país admiten que ese optimismo se ha derrumbado pues no tendrán el respaldo de una situación económica favorable".
Las reformas estructurales sí van a tener un buen efecto, pero esto no se verá en el presente sexenio; deberá pasar más tiempo para que esto suceda, agrega.
Ahora el país ha entrado a una zona de turbulencias económicas con los indicadores negativos que venían presentandose y el triunfo de Donald Trump, que refuerza las tendencias negativas, dice.
Serán turbulencias, aclara, pero no la "tormenta perfecta" que algunos pronostican para cuando Trump asuma la presidencia de Estados Unidos.
Y advierte:
No debemos acusar de todo esto a Trump pues se trata de tendencias negativas que se han generado desde hace varios meses, antes de que el hoy presidente electo fuera candidato.
Erick Guerrero confía sin embargo en una recuperación de la economía mexicana, si no inmediata cuando menos a mediano plazo, una vez que las reformas vayan logrando su cometido.
