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Durante los últimos meses del gobierno de Guillermo Padrés las autoridades municipales de Cajeme denunciaron el retiro de efectivos de la Policía Estatal Investigadora de Ciudad Obregón con la intención, sugería el exalcalde Rogelio Díaz Brown, de propiciar más violencia y generar desconfianza hacia el ayuntamiento priista con miras a las elecciones del 5 de junio de 2015.
De las declaraciones de Díaz Brown se hacían eco los priistas en campaña y en general los grupos hostiles al exgobernador panista a quien culpaban de los crímenes cometidos en los primeros meses del año pasado.
Pero al llegar la administración de la priista Claudia Pavlovich las cosas no cambiaron. La baja de elementos de la PEI destacados en Cd. Obregón permaneció como la había dejado Padrés e incluso se retiraron unos más.
Cajeme quedó más desprotegido y la ola de violencia se ha recrudecido en los meses recientes, sólo que ahora ninguna autoridad o partido reclama al Gobierno Estatal haber retirado un buen número de efectivos de la PEI para concentrarlos en Hermosillo.
Ahora, ante la creciente ola de violencia que este fin de semana se manifestó con el hallazgo de dos cuerpos desmembrados en el área de la Central de Abastos, el procurador Rodolfo Montes de Oca Mena anuncia que "vamos a reforzar, sí tenemos registrado que se ha estado incrementando los homicidios en Ciudad Obregón, y estamos reforzando la parte de investigación".
Y el subprocurador de Averiguaciones Previas de la Procuraduría de Justicia del Estado (PGJE), Carlos Castillo Ortega, informa que se abrirá una base de operaciones mixta en Ciudad Obregón "donde van a intervenir el Ejército, la PGR y el Estado en Cajeme, están en platicas los tres niveles de gobierno en Ciudad Obregón, este es un esquema similar al de Hermosillo".
Sólo que estos anuncios no son nuevos, ya desde hace casi un mes se viene se ha hablado al respecto y lo recalcó el secretario de Seguridad Pública del Estado, Adolfo García Morales, durante su visita a esta ciudad.
Mucho tiempo de preparativos y anuncios, mientras la violenca extrema se sigue manifestando en Cajeme.
