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La iglesia necesita jóvenes abiertos a la posibilidad de entregar su vida al servicio permanente mediante la consagración al sacerdocio, resaltó Felipe Padilla Cardona.
En un encuentro sostenido con muchachos de toda la Diócesis hace unos días, el obispo de Ciudad Obregón pidió a los participantes no tener miedo y participar en los encuentros vocacionales que el Seminario Diocesano realiza durante el año.
Y es precisamente este sábado y domingo cuando se llevará a cabo el segundo de estos encuentros, cuyo fin es permitir a los jóvenes varones que conozcan cómo vive un seminarista, las actividades que realiza y los retos a los que se enfrenta dentro de la casa de formación.
Fernando Solorio Villalobos, seminarista integrante del equipo de Promoción Vocacional, informó que a lo largo del año se realizan cuatro encuentros y es en el último donde se determina quiénes son los jóvenes que muestran la actitud y cumplen con los requisitos necesarios para iniciar su formación dentro del Seminario.
Mencionó que la invitación es para todos los jóvenes mayores de 17 años o que estén cursando el cuarto semestre de preparatoria, mismos que deberán presentarse el sábado 13 de febrero a las 9:00 de la mañana en el Seminario ubicado en el kilómetro 2 de la carretera Providencia-Bacum donde se llevará a cabo el encuentro que terminará el domingo a las 10:00 horas.
El encuentro no tiene costo y solo se pide a los jóvenes llevar ropa de cama y deportiva, biblia, rosario y artículos de aseo personal.
Por su parte José Ramírez López, seminarista de cuarto año de filosofía, invitó a todos los jóvenes a darse la oportunidad de vivir esta experiencia y dejar a un lado el miedo para conocer más acerca de la vocación al sacerdocio.
“Ir al encuentro vocacional no significa que vayan a salir con la sotana puesta, es un retiro de acompañamiento y orientación sobre la vida sacerdotal. A veces los jóvenes se rehúsan a asistir porque solo piensan en sí mismos, en lo que les gusta, pero deben saber que lo que Dios les ofrece es mejor”, platicó.
También el seminarista Martín Castro Chiquete resaltó que en la Diócesis no hay una crisis de vocaciones, sino una crisis de respuesta, pues es Dios el que llama constantemente a todos los jóvenes a la vocación del sacerdocio, la vida religiosa o la vida laical.
“A los jóvenes les sigo que Jesús es la mejor garantía que pueden tener, mejor que el dinero o el poder. Cuando Dios nos invita Él paga la cuenta de todo, ojalá que como en los pasados encuentros en éste también sean muchos los jóvenes que asistan y continúen el camino de discernimiento vocacional”, reiteró Castro Chiquete.
DATOS:
-En la Diócesis de Ciudad Obregón hay cerca de 120 sacerdotes para una población de más de un millón de católicos, distribuidos en todo el territorio diocesano que abarca 32 municipios de la sierra y el sur de la entidad.
-Se calcula que hay un sacerdote por cada 10 mil feligreses
-En los últimos 3 años se han ordenado solo seis sacerdotes
-8 jóvenes ingresaron al seminario en septiembre de 2015
