El 6.8 por ciento del presupuesto del IMSS en Sonora se destina para el manejo de pacientes con insuficiencia renal, lo que la coloca entre las patologías más costosas para la institución.
Williams Ballinas Castellanos, subdirector de la Unidad de Medicina Familiar número 1, dijo que una de las complicaciones más severas en la salud del paciente diabético es cuando presenta insuficiencia renal, enfermedad que representa un alto costo para el Instituto.
"Cuando los riñones del paciente dejan de funcionar, tiene que ser sometidos a diálisis peritoneal o a hemodiálisis, estos tratamientos tiene un alto costo para el instituto y en los últimos años el número de personas con daño renal ha ido en aumento, principalmente en diabéticos", expuso.
En los servicios del segundo y tercer nivel que otorga el IMSS, el 50% de las personas que están en diálisis son diabéticas y el otro 50% son derivadas de otras enfermedades, por lo tanto, se concluye que la insuficiencia renal es un grave problema de salud pública.
Explicó que esta complicación se puede evitar dando al paciente un tratamiento dinámico, estructurado y motivacional, guiado por un equipo multidisciplinario para controlar su salud; servicio que ofrecen en la UMF No. 1 a través del módulo DiabetIMSS.
"Este esquema brinda atención integral, una enfermera imparte dos horas de sesión educativa, se cuenta con médico, nutriólogo, apoyo de estomatología, asistente médico y trabajo social, con esto es como logramos tener un mejor control preventivo”, resaltó.
DiabetIMSS está al alcance de toda la derechohabiencia que requiera de ayuda para el control de la enfermedad, contempla 12 sesiones, en las cuales el paciente diabético aprende el correcto manejo de su padecimiento a través de la alimentación, la ejercitación y el medicamento.
