Un 24 de diciembre, seis años atrás, los papás de Carlos Alberto Quintero Álvarez recibieron la noticia de que su hijo tenía leucemia.
En aquel tiempo, Carlos Alberto tenía tres años de edad cuando inició un tratamiento de transfusiones sanguíneas y quimioterapia.
De ser un niño inquieto que parecía tener energía a montones, pasó a estar postrado en la cama de un hospital.
De esa etapa, lo primero que se le viene a la mente son los constantes cateterismos que le hacían, la cantidad de medicamentos que tomaba y los efectos secundarios de la quimioterapia.
“Algunas veces me ponían Uichos catéteres, y ya no, ahora nomás vamos y me están checando y es lo que me acuerdo, que te dicen los médicos, nada que ya estoy bien, ya me dieron de alta de los medicamentos, ahora nomás me checan”, expuso el menor.
Los síntomas que mostró el pequeño fueron pérdida de color en los labios y permanecer dormido la mayor parte del día. El que sus padres hayan buscado atención médica para su hijo a la brevedad ha permitido que hoy el niño a sus 9 años de edad lleve una vida sin restricciones, como el resto de sus primos y amigos.
La tía del niño, Marcela Quintero López, dijo los días de angustia en la familia quedaron atrás y hoy lo que les causa dolores de cabeza son las constantes travesuras de Carlos Alberto.
“Aquí la experiencia es que nos ha tocado ver muchos en el camino que se nos van pero fue algo que nos unió más y ahí vamos todo adelante, se le diagnosticó en una etapa temprana, manifestó rápido los síntomas y fue muy rápido el tratamiento que llevó”, declaró la tía.
Este domingo 15 de febrero, se conmemora el Día Internacional de la Lucha Contra el Cáncer Infantil y niños afectados con la enfermedad, disfrutaron este jueves de una mañana en el Parque Infantil Ostimuri, con regalos y comida en un evento organizado por el Programa de Cáncer Infantil y Juvenil de la Jurisdicción Sanitaria número 4.
