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Diputados locales del PRI se reuieron este día con funcionarios del Ayuntamiento de Cajeme y, poco después, con representantes de cámaras empresariales para abordar el tema del presupuesto 2015 para Cajeme.
Asisitieron los diputados cajemenses Abel Murrieta, Alfredo Carrazco, Rosana Coboj y Abraham Montijo, además de Marco León Perea, Karina García Gutiérrez y Alejandro García Rosas.
Ambas reuniones fueron realizadas para cumplir con la petición tanto de las autoridades municipales como de los empresarios, quienes solicitaron la presencia de los legisladores en esta ciudad para exponer el rechazo al presupuesto asignado por el Estado para obra pública en Cajeme durante el 2015.
Dicho presupuesto es por 38 millones de pesos, cantidad que se considera demasiado pequeña comparada con las necesidades que tiene nuestro municipio.
Los diputados priistas atendieron la invitación hecha a la comisión de Hacienda del Congreso local, no así los panistas.
Ante esta ausencia ambas reuniones, la celebrada con funcionarios y la de los empresarios, se convirtieron en un escenario ad hoc para la promoción política de los diputados por Cajeme.
Una frase del diputado Abel Murrieta sintetizó el objetivo evidente de las reuniones:
"Esto se lo va a cobrar la ciudadanía cajemense a los panistas a la hora de las elecciones".
Legisladores locales no escuchan al pueblo: Canaco
Como una falta de cultura de los legisladores de no escuchar a la comunidad que representa, calificó Daniel Osuna Acosta, vicepresidente de Canaco, a los diputados locales que representan la Comisión de Hacienda en el Congreso del Estado, quienes se han negado a dialogar con los organismos empresariales del sur de Sonora sobre el presupuesto 2015.
Hasta ahora dijo, el interés solo ha sido de los legisladores priistas, mientras que del resto de los representantes “muestran tristemente la misma actitud de los diputados y del Gobierno del Estado; todo apunta a un revanchismo político por el tema del agua”, apuntó Osuna Acosta.
Por lo anterior, señaló que la próxima legislatura local deberá de tener una actitud más propositiva, poner candados para evitar actitudes como las que se han mencionado y sobre todo, hacer que los presupuestos para los municipios sean más equitativos.
