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En los próximos meses la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH) instalará cámaras de vigilancia en los reclusorios, centros de arraigo y celdas preventivas de Cajeme para prevenir los abusos de autoridad contra las personas detenidas o encarceladas, anunció Raúl Ramírez y Ramírez.
Para ello, dijo, se creará el Centro de Monitoreo Permanente con tecnología de punta que permita grabación de audio y dotado con cámaras encriptadas en las Comandancias.
El equipo de cómputo, audio y video se prevé instalarlos en las Policías Municipales, bases de la Policía Estatal Investigadora, en la Policía Estatal de Seguridad Pública del Estado, en las Agencias del Ministerio Público, en los Centros de Arraigos y en los Ceresos del Estado.
Lo anterior, para evitar se sigan registrando casos de abusos de autoridad, como lamentablemente ha sucedido tanto en las instalaciones policíacas como en los mismos Centros de Readaptación Social en Sonora.
Ramírez y Ramírez anunció además que la CEDH en Cajeme tendrá un nuevo representante, el abogado Mario Ríos Lugo , quien tendrá facultad para recibir quejas y resolverlas. Asimismo la delegación local tendrá una nueva área de atención a víctimas que serán atendidas por una sicóloga.
A nivel estatal, añadió, la CEDH abrirá nuevas delegaciones en varias ciudades sonorenses y dos centros especiales para la atención de comunidades indígenas; una en Cajeme, para la etnia yaqui, y otra en Navojoa, para la mayo; ambas brindarán atención en lengua indígena.
Hasta hoy la CEDH ha emitido 90 recomendaciones a diversas autoridades municipales y estatales en Sonora, mencionó.
Respecto al caso de Gisela Peraza, la exempleada de la casa de Gobierno del Estado quien fue torturada durante la investigación de un robo a dicha casa, el ombudsman sonorense afirmó que la Comisión Estatal de D. H. tuvo en sus manos este caso durante dos meses, tiempo en el cual se aplicó el Protocolo de Estambul, que protege a las personas bajo investigación judicial, y durante este tiempo no hubo ningún indicio de que Gisela hubiera sido torturada por elementos de la Policía Estatal Investigadora, como lo demostró después la Comisión Nacional de Derechos Humanos.
"Yo ya había hecho siete recomendaciones diferentes al entonces procurador Abel Murrieta", aseguró RRR...y más adelante comentó: "No me hubiera costado nada ponerle una rayita más al tigre Abel".
Después de que el Gobierno del Estado aceptó la recomendación de la CNDH, el proceso ahora está en etapa de cumplimiento.
