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El impacto que han tenido las bajas temperaturas entre la población que vive en la zona rural y costera del sur de Sonora amerita que se declare a esta área como zona de desastre, declaró Jesús Félix Holguín.
Urge acelerar el proceso para que se haga dicha declaración pues los habitantes de las zonas afectadas se encuentran en condiciones muy difíciles, sin trabajo y por lo tanto sin ingresos para mantener a sus familias, agregó el delegado regional de la Secretaría de Gobierno estatal.
Félix Holguín mencionó que durante un recorrido por los valles Yaqui y Mayo platicó con jefes de familia y trabajadores en general quienes le plantearon la difícil situación económica por la que hoy atraviesan.
"No sólo se han cancelado jornales para muchos trabajadores agrícolas; también los pescadores han sido golpeados por el frío y los vientos que no les permiten realizar las labores diarias con las que sostienen a sus familias", comentó.
En el Paredón y en general en las bahías de esta zona hay alrededor de 5 mil familias que viven de la pesca, y que desde el 15 de diciembre, cuando empezaron a presentarse fuertes vientos, no han podido ir por el camarón y otras especies que capturan y venden a diario, afirmó.
Félix Holguín expresó que ya ha solicitado la intervención de Luis Alberto Plascencia Osuna, secretario de Desarrollo Social, y Víctor Landeros Arvizu, titular de la Unidad Estatal de Protección Civil, para entregar ayuda inmediata a esa población y acelerar la solicitud de zona de desastre.
No pueden pasar muchos días pues la situación de la gente es precaria, y así como se solicitan apoyos para los productores afectados por las heladas, también debe atenderse la situación difícil que está viviendo la gente más pobre del campo y de las zonas pesqueras, indicó.
Si se logra dicha declaratoria, podrán obtenerse recursos económicos y la aplicación del programa de empleo temporal previsto para situaciones como éste, puntualizó Félix Holguín.
