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La Ley Antitabaco contempla algunas disposiciones que no están al alcance del propietario del establecimiento poderlas controlar, dijo Andrés Salas Sánchez.
El vicepresidente de la Canirac Ciudad Obregón señaló que en reunión que en días pasados tuvieron con autoridades estatales de salud, propusieron que la primer visita de los inspectores sea de cortesía, para en caso de que haya alguna irregularidad, se haga la observación, se dè tiempo para corregirla y así evitar ser multados pues el monto de ésta puede alcanzar más de 30 mil pesos.
Expuso que la dirigencia nacional mantiene las negociaciones con legisladores del Cogreso de la Unión para lograr modificaciones a la ley que aunque es apoyada por la industria restaurantera, hay segmentos en los que le pega a la economía del empresario.
Algunas de las disposiciones difíciles del controlar por el restaurante, es el que no puede fumar gente a 6 metros del establecimiento, por lo que de llegar un inspector y encontrar a un comensal fumando ya sea en la banqueta del restaurante o en el estacioemiento, aplica sanción económica.
Recordó que en el 2008, cuando entró en vigor la Ley Antitabaco, cayeron las ventas del sector restaurantero en la localidad en un 20 por ciento y aunque el empresario tiene la opción de adecuar al menos el 30 por ciento de su local para área de fumadores o de declararlo 100 por ciento libre de humo de tabaco, la ley la consideran “agresiva”.
