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De los actos para exigir justicia para el esclarecimiento de su muerte, los priístas pasaron a los eventos cargados de nostalgia, la nueva forma de recordar a Luis Donaldo Colosio Murrieta, el candidato presidencial que hace 17 años fue asesinado en Tijuana.
Ahí está el altar en honor al magdalenense que fue colocado en el Recinto de los Inmortales, una galería de fotos de destacadas líderes priístas que ya se adelantaron en el camino, como Josefina Monzón, Consuela Avendaño, Juanita Villalobos, entre otras.
La historia del dirigente del PRI, José María Parada, quien lo invade la emoción al recordar que el edificio de la Sinaloa sería inaugurado por Colosio Murrieta después de visitar Navojoa, lo cual “no fue posible, pues nunca llegó”.
Ahí está la intervención del niño Alvaro Terrazas, estudiante de la primaria Plutarco Elías Calles, quien destacaba entre sus frases el famoso discurso del 6 de marzo que Luis Donaldo leyó en el monumento a la Revolución.
También aparece Altagracia Luna, de 85 años, quien entre los asistentes presume una foto enmicada donde aparece junto a Colosio Murrieta, precisamente cuando estuvo de gira en Cajeme, unos días antes de que fuera “destapado”.
Y la que pudiera ser la nostalgia más próxima salió de la voz de Baltazar Peralta del Movimiento Ciudadano por el Agua, quien asegura que “si Colosio viviera estaría en contra del proyecto del Novillo porque rechazaba las injusticias”.
No por algo su hijo Luis Donaldo Colosio Rioja los “balconeo” por medio de las redes sociales: “Cómo me molesta la fundación Colosio del PRI! No hacen más que explotar el nombre de mi padre por intereses personales. Hipócritas”.
Para estar en la misma frecuencia del Caso Colosio, Luis Armando Alcalá, presidente de la Fundación en Cajeme, intentó “dar carpetazo” a la polémica que surgió entre los priístas y el hijo del malogrado candidato presidencial.
“Nosotros somos muy respetuosos de sus opiniones y no nos interesa polemizar”, declaró mientras colocaba la ofrenda floral en el busto del magdalenense y posaba frente a las cámaras para la posteridad
