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El debut de España en el Mundial de Sudáfrica 2010 estuvo manchado por una derrota ante la selección de Suiza.
La "furia roja", favorita de muchos, pronto se repuso del fracaso y la calidad de los Puyol, Piqué, Xavi e Inisesta se impuso en los siguientes partidos hasta alcanzar el primer campeonato mundial de la selección española.
Lo de Suiza había sido una sorpresa sin consecuencias y como sucede en cada Copa del Mundo después de la ronda inicial se fueron imponiendo las grandes potencias y al final quedaron frente a frente España y Holanda.
Ahora en el Mundial de Qatar se han dado dos grandes sorpresas durante la primera ronda eliminatoria, dos "batacazos" dicen, con el triunfo de Arabia Saudita ante Argentina y el de Japón ante Alemania.
Dos partidos para la historia, dos grandes sorpresas, pero eso no implica que este torneo será de los países con menos historia en las copas del mundo.
Poco a poco la experiencia, la calidad y la fuerza de las potencias futbolísticas habrá de imponerse y dentro de dos semanas veremos en los partidos de "muerte súbita" a los mismos de siempre, con algún añadido que no será ninguna sorpresa como no lo fueron Holanda en el 1974 y Croacia en Rusia 2018 pues antes de llegar al partido de campeonato traían el plus de jugadores que estaban entre los mejores del mundo.
Arabia Saudita, Japón y el que dé otro "bacazo" festejarán con todo derecho sus victorias inesperadas. Pero al final pasarán al repertorio de los que juegan en un Mundial y con eso es suficiente.
