Uno de los anuncios del Super Bowl de este año ha desatado la indignación por su mal gusto.
El spot corre a cargo de Carl´s Jr., una conocida marca de hamburguesas, que vende su nuevo producto “completamente natural”.
Para promocionarlo, la empresa muestra a la modelo Charlotte McKinney paseándose ligera de ropa por una ciudad mientras sus partes íntimas están ocultas tras varios objetos estratégicamente situados. Durante todo el vídeo, el espectador tiene la sensación de que la protagonista va completamente desnuda; al final se desvela que no es así.
“Me encanta ir al natural (…) Me hace sentir mejor”, dice la McKinney al final del anuncio mientras muerde una inmensa hamburguesa.
Los anuncios de la Super Bowl son de los más esperados del año: las marcas comerciales aprovechan para dirigirse a una audiencia de varias decenas de millones de personas con spots espectaculares a precios desorbitados. Muchos de ellos incurren habitualmente en contenidos sexistas.
El director de Marketing de CKE Restaurants (empresa matriz de Carl´s Jr.) se defiende de las críticas en una entrevista en el diario USA Today diciendo que “el anuncio va directamente dirigido al público objetivo básico de la marca, un hombre hambriento de 18 a 34 años”. “Sabemos, por nuestra historia, que este es el tipo de anuncio que quieren ver una y otra vez”. El anuncio sobrepasa las 5 millones de reproducciones en YouTube.
No es la primera vez que Carl´s Jr. sobrepasa los límites del sexismo y el mal gusto: en años anteriores, sus anuncios con Paris Hilton y Kate Upton también fueron blanco de las críticas por mostrar una imagen de las mujeres alejada de la realidad.
Casi la mitad de los espectadores de la Super Bowl son mujeres.
