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La antigua Leyenda o fábula alemana "El Flautista de Hamelín" es un obra documentada por los hermanos Grimm, cuya traducción original del alemán significa: El cazador de ratas de Hamelín. La ciudad Hamelin en 1284, que estaba infestada de ratas y de pronto aparece un desconocido flautista que se ofreció a limpiar la ciudad de todas las ratas a cambio de una recompensa, y tocando su flauta encantó a los roedores y los sacó fuera de la ciudad. Pero los pobladores no le dieron la recompensa que le habían prometido… (Breves datos tomados de Wikipedia). Pongo la fuente bibliográfica, no vayan acusarme de plagio como a un presidente de un País lejano.
Hace unos días el aferrado Andrés Manuel López Obrador (AMLO) estuvo en Cajeme, Sonora, promoviendo de nuevo, ¡otra vez! su candidatura para llegar a la presidencia. Su reiterativo discurso anticorrupción, que es la base de su campaña, con la que “encanta a la gente por su buena intención” de combatir ese flagelo añejo que lacera al País. El, como El Flautista de Hamelín, promete sacar a todos los roedores políticos de México, nada más que a diferencia del flautista de la leyenda alemana, quiere que el pueblo le dé la recompensa por adelantado (el voto en el 2018), no quiere padecer, tal vez, como aquel de la Leyenda, que el Pueblo no le pagó y en su enojo, volvió a la ciudad y con su flauta encantó a jóvenes y niños, los secuestró y nunca más los volvieron a ver, ni a él ni a los niños.
AMLO con sus encajonados discursos se ha convertido-sin lograr todavía sus ¿buenos propósitos? – en el presunto cazador de ratas, versión Mexica. Su promesa de limpiar de todas las ratas de dos patas al país; ha hecho que también lo sigan, como al personaje de la leyenda, gente que quiere ver ese “desfile o éxodo de esa fauna”, de tanto animal dañino (perdón por lo de animal, no me vayan a multar los políticos…a quien le quede el saco). También ha encantado algunos de la vieja intelectualidad con tendencias izquierdistas, quizás en añoranza de sus años mozos, en los idealismos puros de cualquier estudiante universitario clase mediero.
(Confieso que cuando universitario, también padecí “el mal de izquierda”-no todo es malo-, pero al hacer conciencia que un gobierno totalitarista, si no se vive y se piensa como te dicta el régimen, el Estado, pone en cautiverio lo más preciado de un ser humano; la libertad de pensamiento. Recomiendo el libro de un escritor y poeta polaco, Czeslaw Milosz: El Pensamiento cautivo).
El flautista mexica, a pesar de su discurso “bipolar” últimamente, porque pasa de la agresividad que lo caracteriza a la conciliación pacífica, es el candidato a vencer en la contienda del 2018. Pero aguas, ya que como menciona la periodista Sabina Berman, AMLO confunde la venganza, con la justicia. P
No vaya a volverse como el inMaduro venezolano.
Alguien que asistió a escuchar su oratoria, en el Teatro del ITSON, en Ciudad Obregón, dijo que no escucho nada nuevo en su discurso y “que de tanto escucharlo ya se lo sabía de memoria” (sic). El teatro lleno, principalmente de mujeres y gente clase media baja, y baja, donde más penetración tiene. Por supuesto acudieron para escuchar, lo que todo ciudadano queremos oír, que la corrupción realmente se combatirá en todos los niveles. Mejores oportunidades de trabajo, educación, una sana economía en el País, etc. Retórica de cualquier político en campaña electorera, que nunca se concretan por intereses creados, desgraciadamente, por financiamientos de sus campañas.
Aquí hay que recordarle, no solo al Flautista presunto cazador de ratas, AMLO, también a todos los políticos, la pregunta que hace el fallecido cantante, su paisano (“tabajqueño”) Chico Che y La Crisis, en una de sus canciones: “Quien pompo, quien pompo” campañitas “quien pompo”.
Pregunta al “flautista de Hamelín mexica” y a sus seguidores:
¿Por qué evadió las preguntas que le hicieron, sobre su declaración 3 de 3? Y Otras que deberían estar en la mesa de debates de cualquier político, como el conflicto magisterial, las uniones igualitarias –No matrimonios- la adopción de niños, el aborto, como va combatir las mafias del poder.
Tendrá que tocar su flauta muy fuerte para a ver si logra llevar al desPeñadero a todos los roedores políticos. O quien llegué al poder, no solo necesitará a un cazador de ratas con o sin flautas encantadoras, pero si varias toneladas de un fuerte raticida.
#PARACAMBIARYOMEINCLUYO
Dr. Raúl Héctor Campa García
Ciudad de México. 24 de agosto del 2016
raulhcampag@hotmail.com
