Sobre la figura de Jesús Félix Holguín pesa no solo la responsabilidad de la gubernatura, pues la elección de Cajeme es clave para la victoria del próximo 7 de junio, y ahora Jesús actuó como “salvavidas” del candidato Javier Gándara al evitar que protagonizara otro dislate verbal como el ocurrido en Hermosillo, donde llamí a su equipo de campaña “macanas”.
Durante el evento con candidatos de la fórmula panista de la localidad, el ex presidente municipal dio muestras que aún mantiene en buen estado su “colmillo retorcido”, mejor incluso que la especie del felino dientes de sable.
El empresario harinero encabezaba una firma de compromisos por Cajeme, pero antes hubo una ronda de preguntas y fue entonces que un reportero de Telemax le pidió que si podría abundar sobre el tema.
Gándara Magaña le respondió que lo haría mediante un video y preguntó a la audiencia, en su mayoría reporteros, si ya conocían el proyecto. El silencio fue sepulcral, lo que no fue del agrado del ex acalde de Hermosillo.
“Si no lo conocen hay que regañar a Carlos Díaz (responsable de medios en la campaña) y que los invite una comida aunque sea a la cecina para que lo conozcan bien”, expresó el empresario, lo que fue celebrado por la tropa reporteril.
Estaba a punto de formalizarse la invitación, cuando alguien del equipo gandarista comentó que el video podría proyectar en ese momento en la sala, como así fue y Jesús Félix “entró al quite” para levantar los ánimos que causó el frustrado “columpio”.
“El martes tendremos una comida con el candidato y los medios de comunicación”, anunció el expresidente municipal de Cajeme, mientras que el mencionado Carlos Díaz “sudaba la gota gorda” ante el posible regañó de su jefe. Y corre video…
Ya un poco más sereno, el comunicador recordó el episodio ocurrido al iniciar la campaña en una colonia popular de Hermosillo, en un desayuno donde se convocó a 400 personas, pero asistió el doble de comensales y la comida no alcanzó. El candidato Gándara les recriminó y llamó a los organizadores “macanas” (codos).
“Fueron solamente 12 los que no alcanzaron y fue a esos a los que les preguntó el candidato si ya habían desayunado”, agregó el responsable de medios. “El regaño del candidato al equipo fue en buena onda”, aclaró. Al parecer, por esta vez, "la sangre no llegó al río".
A lo lejos se observa pasar a un Gándara más relajado y se detiene para dialogar con el dirigente de Unorca, Alfonso Valenzuela Segura, a quien le presenta su acompañante, el exgobernador de Baja California Sur, Ernesto Ruffo Appel.
